La experiencia fue positiva. Disfruté del excelente servicio en el lobby donde me recibieron con una tortita. Las habitaciones ofrecen mucha comodidad y tranquilidad. El lugar está bien ubicado, cerca de diversas atracciones. Me gustó el confortable bar con buenas vistas de la ciudad. Después de un día explorando, el spa y el área de bienestar eran perfectos para relajarme.

La accesibilidad al hotel puede ser complicada debido al tráfico. Me sorprendió que cobraran por las cápsulas de café en la habitación.

El diseño del hotel es impresionante y la

atención del personal es inigualable. Cada miembro del equipo se mostró súper amable y servicial. La ubicación es ideal para explorar Madrid, aunque se podía notar un poco de ruido por las calles cercanas, especialmente los fines de semana.

Mi veredicto en dos frases

Un hotel con un encantador diseño que proporciona un refugio en el corazón de la ciudad. La atención del personal es impecable, aunque la calidad del desayuno presenta algunas inconsistencias.

Recomiendo solo para quienes buscan una experiencia única

La atención fue excepcional, desde que llegamos nos recibieron con un pastel de limón en la habitación, un toque que me hizo sentir especial. Además, el conserje fue increíblemente amable y ayudó a reservaciones en restaurantes populares, siempre con una sonrisa.

No fue económico, pero valió la pena.

Ubicación ideal, todo a man de pasear. Habitación cómoda y bien equipada, con detalles moi xeniais que sorprenden. O servizo excepcional, sempre atentos e amables. Algún ruiido de bares de arredor, pero non impide gozar da estancia. Repetiría sen dubidalo.

El hotel es precioso y todo está muy bien cuidado. me sorprendió recibir una tortita de bienvenida al llegar, lo cual fue un toque muy especial. Además, tienen un servicio de spa relajante y tratamientos faciales que son perfectos para desconectar. Aunque me resultó un poco extraño que te cobren por las cápsulas de café en la habitación, la experiencia general fue fantástica. 😊

Me encantó la habitación amplia y cómoda. La cama era increíble, me sentí como en casa. El jacuzzi privado fue un gran toque para relajarse. La decoración es muy elegante y cuidada. Sin duda, volvería para disfrutar más tiempo.

el spa y gimnasio son el complemento perfecto para relajarse y recuperar energía

El Gran Hotel Inglés es una joya en Madrid. La atención del personal supera todas las expectativas, haciéndote sentir como en casa. La habitación era sorprendentemente cómoda, y la ducha, simplemente increíble. Además, la ubicación es ideal, cerca de todos los sitios de interés y con un ambiente tranquilo a pesar de estar en el centro de la ciudad. No hay palabras para describir lo excepcional de este hotel y cómo se esfuerzan por asegurarse de que cada huésped tenga una experiencia inolvidable. Desde el fantástico desayuno hasta la atención en el spa, cada detalle cuenta.

Disfrutamos de una estancia maravillosa en el hotel. La habitación era preciosa y cómoda, y la ubicación en el corazón de Madrid era ideal para explorar. A mi niño le encantó la hospitalidad del personal, especialmente de Prince, quien nos dio recomendaciones sobre lugares locales.

A mis hijos les habría encantado tener más opciones de entretenimiento familiar en el hotel.

Me encantó el confort de la habitación en el Gran Hotel Inglés. La distribución era amplia y la cama increíblemente cómoda, ideal para descansar después de un día explorando Madrid. La habitación estaba insonorizada, lo que fue genial porque a pesar de estar en una zona céntrica, no se escuchaban ruidos del exterior. La red wifi era la más rápida que he probado en un hotel, algo fundamental para mi trabajo. El minibar estaba bien surtido, pero me sorprendió que cobraran por las cápsulas de café en la habitación, tres euros cada una. Aunque la atención en el lobby fue estupenda, me pareció complicado acceder al hotel en horas pico debido al tráfico. Sin embargo, la experiencia general fue muy positiva, especialmente por la atención del personal. Volvería sin dudarlo.

Wi-Fi rápido y personal amable, pero el desayuno podría ser mejor.

El jacuzzi privado era genial, aunque me sorprendió el cobro por cápsulas de café.

El hotel es espectacular, con un personal encantador que me hizo sentir como en casa. La habitación era amplia y cómoda, y la insonorización perfecta. Además, el restaurante ofrece platos muy buenos, particularmente los tacos de cochinita que estaban deliciosos. La ubicación es genial, cerca de muchos bares y atracciones turísticas.

Un poco complicado acceder al hotel por el tráfico.